miércoles, 15 de octubre de 2014

Noche de lluvia

Lluvia finita, delgada y transparente. 
Se siente como polvo de diamante,
empapando tu cuerpo; revitalizándolo.

Lluvia, cae ella.
Cuidadosamente, se aposenta haciendo mella.
Qué huella la que deja ella, 
sembrando campos y alimentando ríos.
Qué bello sonido ecucharte.

Lluvia, cae ella. 
Lluvia, suave aroma a tierra mojada. 
Lluvia, cayendo; 
la mejor sonata sin canto,
Sólo el mejor manto.

Lluvia es charco, es lago, es campo.
Lluvia, es crecimiento y pausa;
la que causa todas las orografías
en los mapas de cartografías y,
das alimento a todas las poesías, 
estas noches encapotadas de algodón perlado.